1-Humedecer la cara con agua tibia durante un par de minutos y aplicar gel o espuma de afeitar, porque el jabón reseca la piel y se precisará luego humectarla con crema.

2-El número de hojas y el filo determinan la eficacia de la rasurada, cuanto menor sea el número de pasadas que la máquina hace sobre la cara mejores serán los resultados y menor la agresión. Por eso suele ser más conveniente, si el método elegido para rasurarse es la cuchilla, que sea de al mínimo 3 hojas.
3-Al finalizar enjuagar con suavidad y aplicar un bálsamo after shave. Este tipo de productos dejan la piel hidratada y mejor predispuesta para la próxima afeitada. Además previenen la aparición de arrugas.
Nunca colocarse colonias con altos contenido de alcohol después de afeitarse porque estos productos deshidratan y agrietan la piel. Además queda mucho más predispuesta a mancharse por efecto del sol.