Lo rastrillaron los bomberos, en persona y con ganchos, luego con cámaras de video, en casi 5 kilómetros de cañería y en la planta de tratamiento de líquidos cloacales en el Bajo Segura, Santa Lucía. Y nada. Incluso ampliaron el rastrillaje después de la planta, en el arroyo donde van a parar los líquidos, y también en el río. Hasta el día de la fecha, bomberos siguen buscando el cuerpo de Rodrigo Muñoz pero ya concentrados en el río, la última opción antes de dar por finalizado el rastrillaje.