Miles de representantes de las comunidades católicas y evangélicas se concentraron ayer frente al Congreso para rechazar el proyecto de ley de matrimonio entre personas del mismo sexo, una iniciativa que será debatida hoy por el Senado en medio de una impugnación al tratamiento y el riesgo de que la sesión fracase por falta de quórum.

En tanto, en diferentes esquinas de la ciudad de Buenos Aires y el conurbano se convocaron las personas que están a favor del matrimonio gay, que tiene media sanción de la Cámara de Diputados, y realizado un "Ruidazo por la igualdad" con el aval del Instituto contra la Discriminación (INADI).

Entre 150 y 200 mil personas, según los organizadores, se manifestaron frente al Congreso a favor del matrimonio "varón-mujer" y en "defensa de la familia". La movilización fue promovida por el Departamento de Laicos de la Conferencia Episcopal Argentina (Deplai), junto con agrupaciones de otros credos y de la sociedad civil.

"No es lo mismo prepararse para desplegar un proyecto de familia que convivir con una persona del mismo sexo. Tengamos cuidado en no dejar de lado el prioritario derecho de los niños, que deben ser los únicos privilegiados", expresó el cardenal Jorge Bergoglio en una carta que fue leída durante el acto.

Frente al Congreso estuvieron familias con hijos, estudiantes de colegios católicos y evangélicos, y representantes de movimientos eclesiásticos. Los manifestantes, muchos llegados en micros desde el conurbano bonaerense y otros lugares del país, desbordaron la plaza Congreso, por lo que obligó a la policía a interrumpir el tránsito vehicular sobre las avenidas Callao, Rivadavia, Entre Ríos y la calle Hipólito Yrigoyen.

Uno de los momentos culminantes fue el ingreso en la plaza de la bandera argentina de 200 metros traída desde Rosario. También en una carta, los presbíteros evangélicos Rubén Proietti y Rubén Salomone dijeron que los senadores que mañana votarán en favor del matrimonio homosexual lo harán "presionados", y compararon esta situación con "las candidaturas testimoniales" presentadas en las elecciones de 2009. Movilizaciones similares se realizaron en ciudades como Mendoza, Córdoba, Salta, Corrientes, Rosario, Santiago del Estero y Bariloche, entre otras.

Dentro del Congreso, la Comisión de Labor Parlamentaria acordó, tras varias horas de negociación, el tratamiento del proyecto vinculado al matrimonio gay y el de unión civil, que fue impugnado por el presidente del cuerpo, José Pampuro. La sesión fue convocada para hoy a las 12, y la primera iniciativa que se debatirá será el dictamen de mayoría votado por la Comisión de Legislación General en contra del matrimonio entre personas del mismo sexo. Todos los bloques políticos garantizaron el quórum para la sesión, y si los senadores aprueban el dictamen caerá el proyecto de ley que tiene media sanción en Diputados. Si, por el contrario, ese texto no prospera, entonces se debatirá el texto aprobado en la Cámara baja. En caso de ser aprobado se transformará en ley, pero si es desestimado llegaría el turno de analizar el cuestionado proyecto de unión civil.

Esta iniciativa fue impugnada por la presidencia del Senado, a cargo de Pampuro, tras un pedido realizado por el titular del bloque del Frente para la Victoria, Miguel Pichetto. Fuentes legislativas dijeron, sin embargo, que la impugnación es una facultad del cuerpo en sesión, por lo que podría quedar sin efecto e impulsar su tratamiento. En ese caso, las fuentes dijeron que el bloque kirchnerista dejaría sin quórum el debate.