Ayer en Las Casuarinas, en 25 de Mayo, se conmemoró el 198vo aniversario del Día de la Declaración de la Independencia y de manera peculiar. Un soldado del RIM 22 bailó un malambo y una zamba frente al palco antes de que comenzara el desfile cívico militar. La iniciativa sorprendió a la gente que aplaudió entusiasmada el pequeño show. Unas 5.000 personas participaron de los festejos oficiales, según informó la Policía.

Héctor Bustos sólo se quitó el morrión antes de ubicarse frente al palco y de comenzar a zapatear el malambo que interpretaron sus compañeros de la Banda de Música del RIM 22, ante la mirada atenta de los presentes. Su actuación duró menos de 5 minutos, pero conquistó a los presentes. Algunos pidieron ’otra’, aunque no tuvieron que insistir con el pedido. Es que el soldado ni bien dejó las boleadoras en el suelo, se preparó para bailar una zamba. Y esta vez con una compañera de baile también veinticinqueña de nacimiento como él. Era Viviana Gómez, la actual Criollita del departamento.

Terminado el espectáculo de baile comenzó el desfile que tuvo varios momentos de emoción.

El primero se dio ni bien comenzó el evento. Fue cuando hicieron su paso los alumnos de las tres escuelas más antiguas del departamento que desfilaron unos tras otros: la Prilidiano Pueyrredón, de 105 años, y la Ramón Barrera y la Pascual Chena, ambas de 106 años. La gente aplaudió sin parar el paso de los chicos que concurren a las tres instituciones.

La emoción y aplausos entusiastas de la gente se renovaron cuando hicieron su paso los alumnos de la Escuela Albergue Juan Carlos Navarro, que llegaron desde El Encón para participar del desfile.

Tras ellos, desfilaron los excombatientes de Malvinas que fueron aplaudidos de pie por las autoridades y que recibieron el grito de “¡Viva la Patria!” por parte de la gente.

El momento más emocionante llegó en la parte final del desfile. Fue cuando comenzaron a hacer su paso los miembros de las Fuerzas Armadas y de Seguridad. Y en esta ocasión, fueron los niños quienes se entusiasmaron. Se agolparon tras las vallas para sacarles fotos tanto a los soldados como a los efectivos de la División Canes de la Policía que desfilaron junto a los perros que forman parte de la Fuerza.

Los gauchos fueron los encargados de cerrar el desfile y también sorprendiendo a la gente, ya que algunos desfilaron parados sobre sus caballos para mostrar su destreza.