San Juan, 12 de marzo.- La sequía nuevamente reavivó el fuego subterráneo que se expande bajo los pies de algunas zonas de Médano de Oro, una vieja queja de los productores y vecinos de la zona. Esta vez quien sufrió las consecuencias y en carne propia, fue el ingeniero José Flores (54), quien se desempeña en un área técnica del Ministerio de Educación, y que esta mañana le habían encomendado la tarea de mensurar un terreno lindante a la Escuela Berutti, a tan sólo 50 metros.
El hombre, según relató su mujer Fabiola Quiroga, estaba realizando unas mediciones cuando de pronto se hundió en el terreno, y de inmediato debió pedir ayuda a un chofer de la repartición que lo acompañaba. "Tuvo que arrastrarse para salir vivo", dijo Fabiola.
El hombre fue trasladado de inmediato a la división Quemado del Hospital Marcial Quiroga. "Tiene quemadas las dos piernas, los brazos y las manos. Gracias a Dios está fuera de peligro", aclaró.
