Vaca Muerta, para cuyo primer desarrollo masivo firmaron ayer un acuerdo la argentina YPF y la estadounidense Chevron, es una de las mayores formaciones de hidrocarburos no convencionales del mundo. Este ‘tesoro energético‘ cubre una superficie de 30.000 Km cuadrados y se extiende por cuatro provincias argentinas: Neuquén (suroeste), Mendoza (oeste), Río Negro (sur) y La Pampa (centro). Perforar un pozo, que debe llegar a profundidades de entre 2.500 y 3.000 metros para dar con esta formación originada en el jurásico superior, hace unos 130 millones de años, tiene actualmente un costo para YPF de 7,4 millones de dólares, pero el objetivo es llegar a 5,7 millones de dólares. Explotarla a gran escala necesitaría 25.000 millones de dólares por año.
