Un núcleo de 15 a 20 argentinos se estremeció y festejó en Wimbledon a más no poder el triunfo de Juan Martín del Potro. Mientras el partido transcurría, los compatriotas se diseminaron por diferentes butacas del estadio y lucieron en notoria inferioridad con relación a los serbios, que le "hicieron el aguante" al 2 del mundo con una buena cantidad de banderas y en un número bastante apreciable.
Sin embargo, cuando el encuentro concluyó con la victoria del tandilense, los hinchas albicelestes se dirigieron raudamente al pasillo donde los jugadores, obligatoriamente, se concentran para subir a una terraza y brindarle sus declaraciones al periodismo.
Desde abajo, los simpatizantes comenzaron a entonar el ya clásico "…Oh, Argentina, es un sentimiento, no puedo parar!!!".
Al verlos, Del Potro, que transitaba con una bandera celeste y blanca colgada del cuello, se acercó, los saludó y comenzó tímidamente a cantar.
Luego, el tandilense se refirió brevemente al apoyo recibido. "En las últimas horas recibí miles de mensajes que me emocionaron. Y el apoyo de la gente que está acá en Londres también se sintió. Se los agradezco de corazón", resaltó.