El accidente que sesgó a la familia Aguilar-Yossa (sólo sobrevivió el conductor del auto que chocó contra un caballo en Bermejo) tiene por ahora un detenido. Se trata del dueño del animal, un caucetero de 40 años llamado Hermes Ibáñez, quien se encuentra privado de su libertad desde el 17 de julio pese a que el delito por el que es investigado es excarcelable y podría esperar la resolución en libertad. Para la titular del Segundo Juzgado Correccional, Carolina Parra, la medida es excepcional y denegó la excarcelación por la presunción de que se fugue o entorpezca la investigación. Sin embargo, el abogado defensor de Ibáñez, Edgardo Gómez, afirmó que no considera correcta esa resolución. "La jueza afirma que el imputado no dio su dirección al informar que vive en Bermejo y que por eso teme que se fugue. Pero la dirección de su DNI es precisamente Bermejo Sin Número, porque el pueblo no tiene calles con nombres ni numeración. También argumentó que presupone que Ibáñez, si está libre, puede alterar el lugar del accidente y afectar la inspección ocular. Pero, ¿la jueza espera encontrar frenadas o algo así después de tantos días? Eso lo tendría que haber mandado a hacer inmediatamente después del accidente", dijo Gómez. "Me afecta el dolor de la familia del accidente, pero como hombre de ley considero que el imputado debería esperar el proceso en libertad", apuntó.