No importó el viento, el frío ni la tierra. Emponchados, con boinas y sombreros, un centenar de niños recorrió la Senda del Peregrino a caballo. Fueron ellos los que ayer encabezaron la 29na Cabalgata de la Fe a la Difunta Correa y fue para celebrar su día. Así transcurrió la segunda jornada de la travesía que en esta oportunidad convocó a más de 2.500 jinetes de distintos puntos de la provincia y del país.
Por el frío, la columna salió más tarde desde el predio de la exbodega El Parque en Caucete. Cerca de las 10, el paisaje caucetero estaba colmado de caballos que transitaban por la Senda del Peregrino rumbo a Vallecito. Esta vez, la postal diferente fue que todos los niños que participaron de la cabalgata, fueron los que encabezaron la columna de jinetes y se convirtieron en los protagonistas del evento. La gente los aplaudió cuando ingresaron al pueblo. El inicio de la jornada de ayer no fue fácil, pero más llevadera que la del sábado, cuando el fuerte viento hizo que partieran menos jinetes desde la Municipalidad de la Capital a Caucete. Ayer, la temperatura de la mañana osciló los 5 grados, y el Sol se hizo de rogar. Pero los participantes están acostumbrados a cabalgar pese a las inclemencias climáticas e igual disfrutaron de la jornada.
Así fue que recorrieron poco más de 20 kilómetros en el tramo de Caucete hasta Vallecito para completar uno de los eventos más importantes del mundo del gauchaje local.
Abundaron los ponchos, las boinas y la ropa de abrigo, no faltó entusiasmo y se mantuvo un ritmo parejo que hizo que a pesar de haber partido más tarde, se llegara al paraje de Vallecito cerca de las 14. Allí, una multitud esperó a los jinetes con banderas y aplausos. Mientras que el ambiente estaba impregnado de aroma a asado. En el lugar se apostó mucha gente que acampó y se preparó para presenciar de la fiesta gaucha. Al cierre de esta edición se llevaba a cabo el espectáculo musical y muchas familias optaron por acampar una noche más.
>Los controles
La Policía de la provincia realizó un operativo para mantener el orden de la travesía. Hubo controles en los distintos puntos de la ruta. Principalmente se controló el consumo de alcohol, pero además estuvieron ordenando el tránsito para evitar un colapso por el paso de los jinetes.
>Feria al costado
Una postal usual de ayer fue que a lo largo de la ruta 20 hubo puestos de venta de distintos productos. La gente ofreció desde pan casero hasta queso. También estuvieron los que vendían productos tradicionales, sobre todo apuntando a la gente que llegó desde otras provincias.
>Fila eterna
A eso de las 11 de la mañana, el trayecto que va desde Caucete hasta Vallecito estaba colmado de vehículos que iban haciendo de apoyo logístico a los jinetes que en sus caballos estaban circulando por la Senda del Peregrino. Además, para organizar, estuvieron bomberos voluntarios.
>El acampe
Desde el ingreso a Vallecito fue usual ver gente haciendo asado o acampando al costado de la calle. Cuando ingresó la columna de jinetes al pueblo, la mayoría se apostó para recibirlo con banderitas. Luego llegó el turno del almuerzo y del disfrute de los distintos espectáculos musicales.
>Más tarde
Tradicionalmente, la Cabalgata de la Fe se hace entre marzo y abril, pero como este año hubo para esa fecha una epidemia de influenza equina, la hicieron el fin de semana pasado. Esto llevó a que, por cuestiones climáticas, los jinetes arrancaran más tarde desde Caucete.
La visita
Claudio Chiqui Tapia, el presidente de AFA, fue el invitado especial que tuvo esta cabalgata. El dirigente es devoto de la Difunta Correa y cabalgó un trayecto hasta el oratorio. Lo hizo junto a su colaborador y al gobernador Sergio Uñac.
El aguante
Desde Zonda, la agrupación gaucha Sierras Azules, llegó hasta Caucete para hacerle el aguante a los jinetes. Pero la mañana fría hizo que hicieran una parada, encendieran fuego, tomaran mate y hasta se sacaran unas fotos.
Sopaipillas en el camino
Los cauceteros fueron los anfitriones ayer y es por eso que desde el municipio colocaron una carpa en la ruta para abastecer a los jinetes con sopaipillas, mate cocido y café. Fue Yanina González la encargada de freírlas desde las 7 de la mañana.
El recibimiento
El ingreso a Vallecito fue tan emocionante como de costumbre. La gente se apostó al costado de la calle y con aplausos recibió a los jinetes. También estuvieron los que filmaron con sus celulares el paso de los caballos.