El ritual del “Último primer día” ya es una costumbre entre los adolescentes sanjuaninos que festejan el inicio de lo que va a significar su último año escolar. 
 

La celebración despierta polémica y preocupación por el consumo de alcohol y el estado en el que algunos chicos llegan a la escuela.

La idea del festejo consiste en reunirse en la noche anterior, estar juntos y llegar a la escuela el “Primer Último Día” de clase sin dormir. 
 

El rito se convirtió en un problema cuando los chicos comenzaron a consumir alcohol, a realizar actos de vandalismo y disturbios en la vía pública, lo que despertó quejas del resto de la comunidad.
 

 

En San Juan la mayoría de los adolescentes que cursan 6to adhirieron a esta tradición y se presentaron a los establecimientos escolares sin dormir.

 

En las cuentas de Instagram de las promociones, que también ya son un clásico, los chicos se encargaron de subir fotos del festejo.