Fue una postal atípica para un sábado, día que se caracteriza por ser tranquilo y con poco movimiento en la Universidad Católica de Cuyo. Es que todas las sillas ocupadas, los pasillos llenos de gente parada y el estacionamiento colmado de autos le dieron movimiento extra al lugar. Todo esto fue porque en el Salón de Usos Múltiples se realizó la colación de grado de la Facultad de Ciencias Médicas. En el acto entregaron los 193 diplomas a flamantes egresados de Medicina, Enfermería, Licenciatura en Nutrición, Kinesiología y Técnicos en Hemoterapia.

El movimiento en la UCC comenzó a primera hora de la mañana a pesar de que el acto estaba previsto para las 10. De a poco las sillas comenzaron a ocuparse de familiares que no podían disimular la cara de orgullo. Así, tras la ubicación de los 193 egresados comenzó el acto pasadas las 10.30.

Después de las palabras de la decana de la Facultad, Mercedes Gómez Herrera y de la bendición religiosa, recibieron las distinciones. Uno de los distinguidos fue Darío Mengual (ver aparte) que además portó la Bandera argentina. Después de eso, Daiana Yael Nayara habló en representación de los egresados y fue una de las primeras en ponerle emoción al acto que estuvo colmado de sensaciones.

Más tarde llegó el momento más esperado por todos los presentes. Llamaron a los egresados y les entregaron los diplomas a uno por uno. Por esto el acto se extendió por más de dos horas. Sin embargo, en ningún momento perdió el ánimo de festejo. Por eso, en varias oportunidades los familiares y los mismos egresados no pudieron disimular las lágrimas, mientras que los aplausos hicieron eco al nombrar a algunos estudiantes especiales.

Después de lo protocolar y de que todos los egresados recibieran sus diplomas el SUM se revolucionó y se convirtió en un set fotográfico donde los familiares no pararon de posar junto a los nuevos profesionales que dejó este año.