– ¿Los mejores recuerdos de San Juan?
– Fui muy jovencito en el ’75 cuando me tocó dirigir la orquesta de la universidad. Fueron tiempos de grandes proyectos musicales que hice. San Juan abrió las puertas por primera vez y mi memoria no lo olvida.
– ¿Por qué los clásicos líricos se mantienen vigentes?
– Porque la gente necesita llenarse de ellos. El clásico siempre está como referencia, también pasa con la literatura, el cine y el teatro. El pueblo argentino tiene una cultura lírica muy elevada. Eso se demuestra la existencia de este auditorio que  es de lujo.
– Le gustaría ser el primero en estrenar el Teatro del Bicentenario?
– Claro, ¿por qué no? Si logra San Juan que este futuro teatro se levante, será un triunfo cultural. Los proyectos se pueden lograr cuando hay voluntad, dinero y hacer las cosas bien. San Juan puede constituirse en un polo de referencia nacional.