Regresaron los matinés que en el 2012 desaparecieron porque, según los organizadores, perdieron prestigio. Volvieron a pedido de los adolescentes y se mantienen porque los padres los consideran una diversión sana. Tres organizadores de estas fiestas dijeron que las mismas movilizan a unos 1.500 adolescentes cada vez que se hacen.
En mayo de 2012, un matiné organizado en un hotel céntrico terminó en escándalo y con intervención de la Policía. A raíz de este hecho, estas fiestas perdieron público y caducaron. ’Esto generó temor en los padres, y justificado. Disminuyó la cantidad de chicos que iban a estas fiestas y terminaron por desaparecer, dijo José Luis Huerta, que organiza matinés en Caucete un domingo al mes.
Comenzó en agosto pasado y sus fiestas trascendieron los límites del departamento. A los primeros matinés, según dijo, asistieron unos 150 chicos. Ahora lo hacen unos 450 y tanto de Caucete como de San Martín, Angaco y de otras comunas.
Renzo Avellaneda empezó a organizar matinés en Rivadavia a principio de año y a pedido. Dijo que trabaja en turismo estudiantil y que los chicos que participaron en los viajes le pidieron que organizara matinés, ya que también trabaja en un boliche. Los hace un domingo al mes. Asisten unos 400 chicos cada vez. ’No hay opciones para que los chicos de esta edad se diviertan. Los padres lo entendieron por eso permiten que sus hijos vayan a estas fiestas. En nuestro muro, los padres nos dejan sus comentarios y así medimos su conformidad’, dijo Avellaneda.
En cada matiné que hace Marco Ibarra, en un boliche de Capital, asisten unos 650 chicos. Empezó con una fiesta por domingo, luego domingo por medio y ahora hace una al mes. El fundamento: los chicos no siempre tienen plata para asistir a todas. ’Los chicos de esta edad dependen de sus padres para el transporte a la fiesta y para los gastos de entrada y bebida. Aunque algunos ahorran la plata de la merienda de todos los días, no les alcanza para ir a un matiné todos los fines de semana’, dijo.
Si bien hay diferencias entre los matinés, según quien los hace, los organizadores consultados enumeraron las similitudes. Dijeron que son para chicos de entre 13 y 17 años, y de 18 a 22 en el invierno y de 19 a 23 en verano; que los precios son accesibles (las entradas van de los $25 a $45 y las bebidas entre $20 y $30); que en los locales no se expenden bebidas alcohólicas; y que está prohibido fumar. Agregaron que incluyen fiestas temáticas y regalos para los chicos.

