El reloj de la Plaza España dejó de marcar la hora el domingo pasado. Sobre la loma verde no quedaron las agujas, ni la máquina que lo hace funcionar, ni siquiera los números que estaban encastrados en el césped. Y no es porque estaba roto, tampoco porque se robaron las partes que lo conforman, sino porque tuvieron que sacarlo para evitar que lo rompiera la gente durante el festejo por el Aniversario de la Ciudad de San Juan, que se desarrolló en la esquina de España y Las Heras. Y, de paso, aprovecharon para hacerle trabajos de mantenimiento a la maquinaria, por eso es que demoraron en colocarlo. Pero desde ayer por la tarde, las agujas están girando de nuevo.

"Manejar el reloj no es una tarea complicada, pero no lo puede hacer cualquiera. Nosotros estamos duchos porque siempre nos toca repararlo o calibrarlo. Es que la máquina del aparato -que es eléctrica- es vieja y necesita mantenimiento. Además, muchas veces la gente lo rompe", comentó el director del Obrador Central, Roberto García.

El funcionario dijo además que cuando hay un evento que congrega mucha gente en el Parque de Mayo o en la Plaza España, sacan el aparato de la loma. "Preferimos tomarnos el trabajo de sacar el reloj del lugar antes que tener que arreglarlo después porque lo rompen", comentó García. Sin embargo, en los festejos del domingo pasado se reunieron unas 25.000 personas. Y en otras fiestas, como la del Día de la Primavera, en la que se reúnen alrededor de 60.000 personas, no sacan el reloj sino que hay un policía custodiándolo. García agregó que esta vez se demoraron en colocarlo nuevamente porque estaban aprovechando la ocasión para hacerle trabajos de mantenimiento.

Desde el Obrador no saben especificar cuántas veces al año deben reparar el reloj, pero aseguran que es "seguido". Sobre todo porque muchas veces, al subirse a las lomas para sacarse fotos, la gente lo pisa y lo rompe. O porque los niños se cuelgan de las agujas y descalibran el aparato.

Hasta ayer los elementos que conforman el aparato estuvieron en el taller del Obrador Central, donde estuvo al resguardo de la gente que presenció el espectáculo por el Aniversario de la Fundación de San Juan y los obreros calibraron la máquina. Y desde la tarde, el reloj ya marca de nuevo las horas.