A pocos metros de un parrillero, el hueco pasa desapercibido por las hojas secas y la basura. Aunque tiene más de 2 metros de profundidad y al acercarse, se puede observar el paso del agua del estero de Zonda, a través de una cañería gigantesca. Durante los fines de semana, es usual ver niños andando en bicicleta o jugando a la pelota cerca de este agujero que puede convertirse en una trampa mortal en la Quebrada de Zonda, en Rivadavia. El hueco descubierto está justo donde se encuentran los parrilleros, frente al autódromo. Pero además, el lugar está lleno de residuos y los basureros están rotos. Esto a pesar de que el mantenimiento de la quebrada está tercerizado y el municipio de Rivadavia le paga a la empresa unos 25.000 pesos por mes.

El estero se encuentra entubado desde donde están los piletones hasta el Jardín de los Poetas. Se trata de un trayecto de 3 kilómetros de canal que está bajo tierra. Pero tiene cinco bocas de salida que deberían estar tapadas con placas de hormigón. "Cada tanto hay que sellar los pozos nuevamente porque la gente rompe las tapas. Es lo que sucedió ahora", dijo Juan Fernández, empleado del municipio que supervisa las tareas que se realizan en la zona de la quebrada. El Departamento de Hidráulica es la repartición encargada de mantener el canal que atraviesa el lugar. Según Fernández, hace unos días tomaron las medidas para colocar una tapa nueva y evitar que el agujero esté al descubierto. "Es una tarea que tienen que hacer todos los meses por los destrozos", dijo Fernández.

Pero no es lo único que está mal en una de las principales zonas turísticas del departamento Rivadavia. De 20 basureros que colocaron hace un año, sólo quedan 5 en pie, y la mayoría de ellos están deteriorados. Además es usual ver residuos por todas partes, sobre todo después del fin de semana, que es cuando más gente va a ese lugar. Según Fernández, la empresa que se encarga del mantenimiento del sitio realiza limpieza los días lunes y saca más de una camionada de basura.

Ayer, DIARIO DE CUYO recorrió la quebrada y pudo constatar que hay sectores que se convirtieron en basurales enormes. Los árboles quemados porque la gente prende fogatas en ellos completan un panorama desolador. A esto se suma que de los 150 árboles que plantaron el año pasado, sólo quedan 20. Según Fernández, la gente los rompió o se los llevó. Los destrozos también se pueden observar en el sector del Jardín de los Poetas, donde rompieron los postes que colocaron alrededor del Escudo Nacional.

"Ya no sabemos qué hacer. A veces, Medio Ambiente nos ayuda a controlar para evitar las fogatas al costado de los troncos. Pero no es suficiente", agregó el hombre. Ahora están construyendo carteles indicadores para que no prendan fuego al pie de los árboles ni en la zona del Jardín de los Poetas.

El intendente de Rivadavia, Elías Alvarez, dijo que la limpieza de la Quebrada de Zonda fue tercerizada antes de su gestión y que todavía mantienen ese sistema porque les da resultado. "Evaluamos el rendimiento de la empresa y es bueno, es por eso que decidimos continuar con el sistema. Es también la encargada de reforestar el lugar", dijo el funcionario.