Con su doble cargo, el de intendente reelecto en 2007 -le quedan más de dos años para terminar la gestión- y el de diputado nacional electo en junio último -puede asumir desde diciembre y son 4 años de mandato- Ibarra tiene varias opciones.
Asume 1
Puede asumir como diputado nacional y renunciar como intendente. Es la opción que hasta ahora venía manejando el ibarrismo y que ahora relativizan. Si fuera así, debería asumir el presidente del Concejo, que es el ibarrista Gustavo Rojas, según indica la Carta Orgánica Municipal. Aquí hay otro enroque porque Rojas podría optar por renunciar y entraría en su banca la giojista Mary Mateo; o elegir no renunciar a su banca y pedir licencia, sin dejarle la banca al giojismo. Por otro lado, Ibarra también puede pedir más adelante una licencia en el Congreso por el tiempo que quiera, siempre y cuando lo autoricen sus pares.
Asume 2
El rawsino puede asumir como diputado y no renunciar como intendente, que es la opción que maneja ahora. Según dijo a este diario el presidente de la comisión de Peticiones y Poderes del Congreso, el tucumano Gerónimo Vargas Aignasse, esto en principio está permitido, si el Concejo Deliberante le autoriza una licencia a Ibarra, pero “habría que ver bien el caso”. Según la Carta Orgánica Municipal, el intendente está sujeto a las mismas inhabilidades, incompatibilidades y prohibiciones que los concejales y fija que el cargo de edil es incompatible con “el ejercicio de otro cargo público electivo”. También establece que el intendente no puede ausentarse del Municipio por más de 10 días hábiles sin previa autorización del Concejo.
No asume
Ibarra puede no asumir como diputado y seguir como intendente, es decir, dejarle directamente la banca a la basualdista Adriana Marino para que asuma en diciembre.
Renuncia
El rawsino puede, luego de asumir como diputado nacional y pasado el tiempo que él quiera en la banca, renunciar a ese lugar y dejárselo a Marino.
