Toda una vida entre bebés 

INCANSABLE. Carmen Grassi ejerce la profesión desde 1978 y pese a tener edad para jubilarse, elige seguir trabajando pues la medicina la apasiona.

“Me encanta, me apasiona lo que hago”, confesó. Ese es el secreto de la hiperactividad de Carmen Grassi (61), quien se recibió a los 23 años y está por cumplir cuatro décadas en la profesión. Neonatóloga, referente en San Juan en la especialidad, pionera en terapias intensivas para recién nacidos y hasta funcionaria pública durante ocho años, Grassi ya está en edad para jubilarse, pero pidió una prórroga para poder terminar de armar el Servicio de Neonatología del Hospital Rawson.

“Siempre quise ser pediatra. Mi espejo fue mi padre, un ser maravilloso, pediatra del exhospital Casa Cuna, un excelente profesional. Me crié en su consultorio jugando con muñecas y a ser doctora. A los 23 años ya estaba recibida, hice la residencia de pediatría en el hospital Pedro Elizalde y luego empecé en Neonatología de la Maternidad Cerdá, ambos en Buenos Aires”, dijo Grassi, nacida en Avellaneda pero sanjuanina por adopción desde 1984, cuando se casó y se radicó en San Juan.

 

Tiene tres hijos y actualmente es jefa de Neonatología en el Rawson y también en una clínica privada. Precisamente, en ambos ámbitos creó las terapias intensivas mientras que entre 2007 y 2015 trabajó en el Ministerio de Salud Pública, los últimos siete años de ese periodo a cargo del área Materno Infancia. En ese lapso, implementó la libreta sanitaria para embarazadas, el fichero cronológico con historias clínicas únicas o los controles periféricos, entre otros aspectos. 

“He tenido muchas satisfacciones en tantos años de profesión. Quizás las más lindas fueron haber tenido en la palma de mi mano un bebé prematuro de menos de 1.000 gramos y que esos niños haya vuelto a verme, ya recibidos de la universidad. Y por supuesto están las tristezas, como esos bebés por quienes dimos todo para salvarlos pero se quedaron en el camino”, apuntó.

INCANSABLE. Carmen Grassi ejerce la profesión desde 1978 y pese a tener edad para jubilarse, elige seguir trabajando pues la medicina la apasiona.