Poda de Formación: El objetivo es dar forma homogénea a la copa, desde los diferentes ángulos. Generalmente se realiza en los árboles jóvenes, arbustos, enredaderas y rosales.
 
Poda de Limpieza: Es la que favorece el desarrollo de las especies, se elimina ramas secas, viejas, dañadas, entre cruzadas, chupones e indeseadas y enfermas. Esta se lleva a cabo en cualquier época del año y las veces que se considere necesario. Por lo general se practica en todas las especies.
 
Poda de Mantenimiento: Este tipo de poda se realiza con mayor frecuencia, su objetivo es mantener la forma original, obtener mayor cantidad y calidad de flores y frutos, así como resaltar el valor ornamental de la especie. Se practica en cercos, ligustros, arbustos de floración, rosales, enredaderas, etc. 
 
Poda de Rejuvenecimiento: Se realiza sobre ejemplares muy adultos y/o enfermos. Son podas muy severas, que pueden producir la muerte del ejemplar, se realiza como última opción con el objetivo de rejuvenecer la estructura de la especie. En el caso de no tener yemas, los cortes deben ser casi pegado al nudo de la rama, no encima ni en la mitad de la rama entre nudo y nudo, sino a unos milímetros de distancia del nudo. Esta poda se realiza en árboles, arbustos, rosales, enredaderas, etc.