ARG Carpas es una empresa sanjuanina que nació en 2013 por la conformación de tres socios y uno de ellos es Micaela Taboada, una joven que con 32 años pudo abrirse paso en el negocio industrial junto a personas que superan los 60 y 70 años.
"Como nueva generación tenemos la obligación de superar la grieta política y apostar al presente, pensando en el futuro. Debemos generar espacios de debate donde se escuchen todas las voces y donde se construya un plan a largo plazo. Creo que desde la UI joven lo estamos logrando, estamos trabajando fuertemente para romper los viejos paradigmas, cambiar la sociedad y salir de la mirada política que no tiene en cuenta a todos los actores", explicó Micaela.
El cambio de pensamiento es un foco temático muy importante para la moderna emprendedora, ya que determina como "fundamental" el accionar de los nuevos jóvenes líderes industriales sanjuaninos en el cambio cultural. "Desde mi parte busco hacer algo mucho más transversal, capacitaciones que destaquen la importancia de la comunicación. Nosotros como privados estamos casi hasta obsesionados por la generación de empleo genuino, y esa formación de líderes debemos replicarla dentro de cada una de las empresas, para que sea un cambio que se traduzca en lo social, para que la gente piense distinto y entienda la importancia de la industria y el trabajo".
La exjugadora de rugby y estudiante de Abogacía afirma que siempre le ha gustado incursionar y posicionarse dentro de los ambientes que son considerados como "masculinos". "En la rama joven somos mucho más mujeres las que participamos, no existe esa participación en el directorio senior de la Unión Industrial, creo que eso se debe a que las nuevas generaciones entienden que no existen diferencias entre el hombre y la mujer, que una empresa puede ser manejada indistintamente por cualquiera. Pero entiendo que son cosas que llevan su tiempo, lo importante es valerse por uno mismo y compartir la creencia de que todos ganamos cuando no se sectoriza".
Taboada explicó que uno de los ejes temáticos más importantes del sector joven local es desarrollar estrategias y planes en conjunto que permitan establecer políticas económicas a largo plazo, apostando a la previsibilidad y a la posibilidad de que los nuevos líderes puedan incursionar en decisiones actuales y no solo en posicionamientos futuros. "Nos tenemos que cambiar el chip y hacer un plan a 20 años, para poder prever. Dejar de pensar en proyectos que duran cuatro años y que luego por cuestiones políticas cambien nuevamente las reglas del juego volviendo varios casilleros atrás", comentó Micaela. Y agregó: "También debemos entender que las realidades y el contexto de las provincias son diferentes a las de Buenos Aires. Las decisiones que se toman en un escritorio a más de 1.200 kilómetros no encuentran sustento en el interior del país, los jóvenes debemos hacer un trabajo permanente para que esto cambie".
La joven accionista de ARG indicó que en la actualidad es básicamente la única mujer que integra el rubro textil de las carpas, y que dicha situación crea algún tipo de recelo entre sus competidores. "Lo bueno es que mi generación viene trabajando de manera conjunta, porque amamos San Juan y queremos que le vaya bien a toda la sociedad. Muchos empresarios no entienden que mediante compras mancomunadas y experiencias compartidas se puede apalear mucho mejor la crisis que atraviesa el sector industrial", concluyó Taboada.
40
años separan a Micaela de sus socios en la compañía, lo que brinda un gran aporte generacional en el nuevo concepto de "empresa abierta".