SIN ALTERNATIVAS. Para el jefe de Nefrología del Rawson, aun si quisieran asistir a todos los pacientes sanjuaninos, no tienen la capacidad y tampoco tiempo para ampliarse. 

 

El convenio con el plan nacional Incluir Salud, que asiste, entre otros pacientes, a personas con discapacidad que necesitan diálisis, no se renovó al finalizar el año 2023 por decisión de Nación y esto pone en jaque la continuidad de la atención. En San Juan, son 130 pacientes los que se dializan en clínicas privadas con este sistema y de no haber acuerdo entre los propietarios de las mismas y las autoridades nacionales, sólo podrían atenderse en el Hospital Guillermo Rawson. Pero, según alertó el jefe de Nefrología de la institución, Fernando Martín, no tienen posibilidad de recibir más pacientes, ya que están trabajando por encima de la capacidad original, por lo que colapsaría el sistema de diálisis. De no haber solución, el 15 de enero los afectados dejarían de ser atendidos en el sector privado y un paciente con insuficiencia renal no puede esperar más de una semana el tratamiento, porque estaría en altísimo riesgo su vida.

Incluir Salud es el programa nacional que reemplazó al Programa Federal de Salud, conocido como Profe. El mismo destina fondos y garantiza la atención de salud para personas con discapacidad que tienen pensiones y no acceden al sistema sanitario privado. Una de las funciones que cumple es pagar el servicio en clínicas privadas para que los pacientes que requieren de diálisis puedan hacerlo. Pero al 31 de diciembre de 2023, el convenio terminó y debían renovarlo, algo que no sucedió, según contó Fernando Martín, debido a que se demoró el nombramiento de las nuevas autoridades hasta la primera semana de enero y estas todavía no renuevan el servicio. Además, dijo que "existe una deuda con las clínicas desde agosto, que con la inflación hace más complicada la situación".

Pero la falta de contrato es lo que más dificulta la situación ahora, explicó el profesional. "Las clínicas van a poder seguir recibiendo los pacientes hasta el 15 de enero, pero después no tienen ni siquiera el marco legal para continuar con las diálisis", agregó. Esto plantea una fecha límite en la que los 130 pacientes, entre los que hay adultos mayores pero también niños y personas jóvenes, tendrían que empezar a atenderse en el Rawson. "Cuando nos informaron de la situación dimos aviso, porque hoy en el servicio del hospital estamos dializando a 73 pacientes, cuando la capacidad máxima es 60, porque sumamos más turnos para poderlos recibir a todos, pero 130 más saturarían el sistema", alertó Martín.

Además, explicó que ampliar la capacidad en el tiempo que hace falta es imposible, ya que las áreas de diálisis "tienen la complejidad de una terapia intensiva, cada máquina cuesta 35.000 dólares y demora un tiempo en estar calibradas y listas". Todo esto sería imposible de soportar para los pacientes, que según el profesional luego de una semana sin dializarse terminarían en terapia intensiva y, sin los cuidados adecuados o de continuar sin el tratamiento, peligra su vida.

Las autoridades de Incluir Salud son regionales, por lo que, si bien asumieron, todavía no hubo un contacto con los propietarios de las clínicas sanjuaninas. "La verdad es que nos inquieta la falta de diálogo a pesar de que lo estamos avisando", agregó el profesional, quien dijo que desde diciembre piden que se regularice la situación. Para Martín, la falta de esta renovación del acuerdo podría significar un problema grave en muy pocos días en el Hospital Rawson, pero también tiene a otros pacientes. Es que al ser el servicio de atención de personas con discapacidad, hay traslados que se hacían con este plan, tratamientos oncológicos, asistencia a niños y adultos con parálisis cerebral y otros cuadros graves.

 

Panorama 

En la provincia hay poco más de 700 pacientes que se dializan, según confirmó el jefe de Nefrología del Hospital Rawson. De estos, 130 entran en el programa nacional que no renovaron.