En la temporada pasada hicieron una prueba de 0,6 hectáreas para una firma holandesa, que trajo expertos de Chile, Sudáfrica, Nueva Zelanda y también Holanda para ver el desarrollo y las posibilidades de esta actividad en plena cordillera de Los Andes. Y el resultado fue muy bueno, ya que de 180 kilos estimados para esa variedad (se hizo una sola), se pasaron los 200 kilogramos y hubo acuerdo para continuar.
En esta temporada, con plantines del vivero mendocino Proplanta, se aumentó el desafío tecnológico y se pasó a trabajar con un reservorio de grandes dimensiones, cubierto con geomembrana de 750 micrones, una pieza de control de equipo de goteo y fertirrigación y la instalación de cañerías madres con cintas laterales cada 0,70 metros. Emiten 1 litro por hora los goteros tipo Streamline, y están ubicados cada 0,30 metros. El equipo está planificado para extenderse el año próximo.
Entre Las Flores y Zonda se encuentra esta localidad donde los hermanos Pedro y Merlo Adaos, Ramón Díaz, también Abdon y Aurelio Cortez, y José Luis Rivera iniciaron sus trabajos en grupo. Hoy se suman más interesados en estas acciones que empiezan a cambiar el escenario agrícola de la zona.
Ellos se mostraron muy agradecidos del arreglo de un gran tractor que poseían y del aporte de herramientas elementales para preparar tierras por parte de la minera Barrick, con lo cual encararon este proyecto. Ahora tienen 5 variedades porqué preocuparse y ven un futuro más alentador.
Y esta semana, a su vez, recibieron 7 implementos más por parte del Programa Prodear.
