“Volver al circuito siendo cabeza de serie me puso un poco de presión. Ahora estoy muy feliz. Ganar un torneo significa mucho, es importante para tener un buen final de año”, comentó ayer Del Potro.
“Ahora voy a buscar mejorar un poco más… Todavía tengo dos grandes torneos y tengo que hacer las cosas bien en Basilea y Paris”, confió pensando en llegar con mejor ritmo al Master.
Sobre el encuentro de ayer, el tandilense explicó que “no tuve un buen comienzo, estaba nervioso porque era una final. En el segundo set, lo quebré en el comienzo y eso me dio confianza. Quiero dedicárselo a todas las madres argentinas, en especial a mi mamá”, terminó el campeón de Viena y tercer argentino más ganador de la historia.