Este verano, los sanjuaninos podrán bañarse por primera vez en las aguas del Dique Punta Negra. Será en una pileta flotante, la primera en inaugurarse en San Juan, cuya estructura ya está siendo armada.
“Yo me dediqué siempre al turismo aventura. Además participo en carreras de aventura y he recorrido distintos lugares del mundo por esa práctica, en esos viajes vi muchas cosas que me dan ideas. Así conocí las piletas flotantes y proyecté los detalles para armar la nuestra”, contó Oscar Ferre, encargado del Parador Punta Negra.
Y agregó que, “desde que pedimos las habilitaciones para instalar el parador tenemos el objetivo de ir incorporando actividades que sean novedosas. Por eso, ya trajimos los triciclos y ahora iniciamos el proyecto de la pileta”, que tendrá una dimensión de 14 metros de largo por 10 metros de ancho y capacidad máxima de 40 personas.
Según relató, lo que está instalado hasta el momento es el lateral de la estructura. “Está formado con una serie de módulos flotantes que se encastran y son de un material similar al que usan los kayak. Tienen una capacidad de carga de 400 kilogramos”, explicó.
Mientras agregó: “A la vez, estamos armando una estructura que tendrá en el fondo y que le dará la profundidad de 1,20 metros a la pileta. Decidimos esa profundidad para que la pueda usar toda la familia. Esa base está hecha con tensores acerados y sobre ellos colocaremos una lona, con el fin de que sea seguro y cómodo para quienes se bañan”.
En cuanto a lo que resta, Ferre indicó que “en los laterales internos tendrá una red para que la gente esté dentro de los límites de la pileta y nadie se pueda meter debajo de los módulos superiores. Eso funcionará además como una especie de colador que permite el paso constante del agua del dique al interior de la pileta”.
Y a eso se sumará una serie de barandas, que ya están construyendo en Buenos Aires y que se colocarán en el perímetro superior, sobre los módulos flotantes, para brindar mayor seguridad al natatorio. Esas mismas barandas se colocarán en la orilla de la pasarela que irá desde la orilla hasta la pileta.
“Toda esta estructura es móvil, lo que nos permitirá ir moviéndola para que siempre mantenga la profundidad que elegimos, sin importar que suba o baje el caudal del dique. Además, tendremos guardavidas exclusivos para la pileta”, sostuvo el dueño de la idea.
En cuanto a cómo funcionará la actividad en la piscina, adelantó que “la idea es que la gente vaya a primera hora y pueda utilizarla durante todo el día. Para eso, recibirán una pulsera identificadora”. Y, aunque todavía no hay una tarifa para poder disfrutar del espacio, comentó: “La idea es poner un precio acorde al bolsillo de la gente”.