El técnico de San Martín se mostró desconcertado ante la derrota de su equipo. “Estábamos muy seguros. Dos pelotazos frontales intranscendentes que terminaron en descuidos nuestros y un dolor de cabeza porque al final uno no tiene el partido asegurado hasta el pitazo final”. “Uno veía de adentro -siguió el DT- que no había manera que Alianza pudiera complicar por todo lo que había intentado. Aparte, San Martín había defendido bien el resultado y lo había trabajado bien. Tuvo la oportunidad de aumentarlo y sacaron la pelota de la raya. No le encuentro explicación, y no voy a echar la culpa a nadie”. Por su parte, el delantero Gustavo Reggi coincidió con los dichos del técnico. “Ellos supieron aprovechar lo último y convirtieron los dos goles. Estaba ganado pero llegó el empate. Hay que estar concentrado hasta que el árbitro toque el pitazo final y nos desconcertamos. Hicimos un buen partido y lo tuvimos controlado, pero sobre el final se nos fue”.
