�Roberto Agüero, de 57 años, trabaja en el municipio de Capital por una pasantía durante la mañana, y por la tarde se dedica a hacer changas. Tiene casa, pero no tiempo para cocinar la cena por eso desde que comenzó el invierno concurre a cenar en el Hogar Teresa de Calcuta. ‘Al mediodía como cualquier cosita por ahí para seguir haciendo changas, pero a la noche llego muy tarde y cansado entonces no cocino. Por suerte en el Hogar me dan comida’, dijo.
