Todavía no se explican cómo hicieron para trepar el cerro ni cuándo lo hicieron. Lo cierto es que cuando el encargado del lugar quiso comunicarse con la ciudad, se dio cuenta que el sistema de comunicación había sido destruido. Esto sucedió en la reserva natural Don Carmelo, en Ullum, la semana pasada, cuando vándalos se llevaron placas de energía solar y parte de una repetidora. Además, rompieron equipos y cables que estaban instalados cerro arriba, a unos 700 metros de donde se encuentra el complejo, que alberga a científicos de todo el mundo. Lo grave es que estos equipos servían para poner en conocimiento a la Policía sobre la existencia de cazadores furtivos en la zona. La reserva se encuentra a 144 km de la ciudad y está a unos 3.000 de altura. Se trata de un sitio con paisajes impactantes y donde se puede disfrutar de la flora y la fauna autóctona, en su más puro estado.
Aunque la noticia recién salió a la luz ayer, fue el pasado miércoles cuando Sergio Pérez, encargado de la reserva Don Carmelo, intentó usar los aparatos y se dio cuenta que no funcionaban. Cuando escaló el cerro Bayo, en la Sierra de la Invernada, a 3.000 metros de la base, para verificar los equipos, se encontró con que los habían robado y destruido. Estos instrumentos estaban adentro en un contenedor en el que había un sistema de antenas VHF. Esta repetidora tenía enlace con la red provincial de emergencias y era utilizada por organismos del Estado en caso de urgencias.
Arturo Curatola, el propietario de la reserva, dijo que “este robo y daño produjo no sólo una pérdida de casi 30.000 pesos, sin que el problema mayor ahora es que el sitio se encuentra incomunicado”. En el lugar se albergan profesores, alumnos y científicos de todo el mundo, como así también, personal de Ambiente, que es el encargado de controlar la caza furtiva en el lugar, entre otras cosas.
Tras la escalada en el cerro Bayo para controlar los equipos, Pérez sufrió heridas en la espalda porque se cayó y tuvo que ser hospitalizado. Ni bien se conoció la situación, Curatola puso en comunicación con la Secretaría de Ambiente y con el secretario de Seguridad, Angel Riera. Hasta ayer, gente de Ambiente, se encontraba trabajando el sitio, para ver qué se podía hacer. Curatola dijo que no será fácil volver a colocar los equipos por las dificultades geográficas que presenta la montañas y porque es difícil encontrar gente que quiera escalar para realizar este tipo de instalaciones, que fueron colocadas en el 2007 para dar más servicio al complejo.

