La diputada nacional y ex esposa del gobernador Jorge Capitanich, Sandra Mendoza, fue una de las principales protagonistas de los festejos del 25 de Mayo, más por voluntad propia que por el lugar que le reservó su ex marido. Aunque llegó veinte minutos antes que su ex esposo y la Presidenta, se vio relegada a las filas secundarias en la homilía. Ello no impidió que Mendoza avanzara raudamente a dar un efusivo abrazo y beso a CFK cuando Sigampa invitó a darse la paz.
