Buenos Aires, 31 de diciembre.- Por esa razón, el médico recomienda "evitar la pirotecnia, más allá de que los artefactos sean más o menos riesgosos, porque el peligro está no sólo en la propia pirotecnia sino también en la manipulación que se hace de la misma. Desde este punto de vista, no hay fuegos artificiales seguros".

Para quienes, aún conociendo los peligros que conllevan este tipo de productos, decidan usarlos, el médico aconseja tener en cuenta los siguientes recaudos: – No colocar los elementos de pirotecnia en los bolsillos ni exponerlos a fuentes que generen calor.

– Una vez encendido el fuego artificial, alejarse a una distancia prudencial.

– No usar pirotecnia dentro de viviendas y al encenderla no apuntar hacia otras personas, construcciones, elementos combustibles y/o árboles frondosos.

– Si el producto no explotó, no acercarse a chequear aunque el mismo parezca apagado.

En caso de que se produzca un accidente: – Concurrir inmediatamente al hospital o centro de salud más cercano a su domicilio.

– En caso de que la ropa o parte de la misma se prenda fuego, envolver al accidentado con una manta. Nunca se debe caminar o correr.

– Lavar la zona lesionada con agua fría.

– No colocar cremas, pomadas o medicinas caseras