Vestidos de alta costura, diseñadores que controlan cada detalle, gamas de colores que logran que todo combine, entradas con estilo hollywoodense y hasta videos en 3D en los que aparecen las homenajeadas. Esos elementos resaltan el estilo actual de los cumpleaños de 15. Donde, desde hace alrededor de 2 años, lo tradicional fue dejado de lado para que la fiesta se transforme en una noche en la que lo único que importa es el protagonismo de la quinceañera, que se mueve en un ambiente adaptado a su personalidad, es decir, hecho a su medida.

Los cumpleaños en los que el locutor anunciaba el brindis, las chicas sacaban la cinta de la torta y la quinceañera recorría las mesas con una canasta repartiendo souvenires, quedaron atrás. Ahora, cada fiesta insume un promedio de 6 meses de preparación y posee detalles destacados y novedosos (ver aparte). Para su realización se une el trabajo de la familia, de organizadores de eventos y, por supuesto, de la quinceañera quien, lejos de regirse por las costumbres, elige según sus gustos.

La revolución llegó hace unos dos años. Esteban Vázquez, organizador de eventos explicó que "las fiestas de 15 ahora son temáticas. Todo se arma en función de la personalidad de la quinceañera. Antes, los padres tenían mucho que ver en la organización. Ahora dicen: Que elija ella, es su fiesta". Siguiendo esta línea hay festejos en los que, por ejemplo, todo se relaciona con el cine o con el circo.

Por su parte, Diego Vega, quien se destaca en el mismo rubro comentó que "todo se hace tan grande que se genera una especie de competencia para ver quién hace el cumpleaños más impresionante. Por eso, los cumpleaños de quince de hoy son los eventos en los que se utiliza la mayor cantidad de servicios. La presencia del diseñador, por ejemplo, es infaltable".

Además de los gustos de la homenajeada, en estas fiestas se pone especial énfasis en el estilo de vida de todos los jóvenes. Por eso, ahora las fiestas tienen dos menúes. "Normalmente, a los adultos se les sirve platos tradicionales, mientras están sentados alrededor de las mesas. En cambio, los jóvenes comen sentados en livings y el menú se basa, principalmente, en comidas rápidas", comentó la organizadora María José Echegaray.

Con la mesa dulce sucede lo mismo. La torta ya no es la mejor opción, ahora se estila armar mesas de golosinas. Claro que, darles el gusto a las cumpleañeras tiene su precio. Los organizadores coinciden en que una fiesta de estas características cuesta entre 200 y 350 pesos por invitado. Es decir que, una fiesta a la que asisten 200 personas puede valer entre 40.000 y 70.000 pesos. Sin embargo, todo vale para realizar el festejo que quedará marcado en el recuerdo de la quinceañera para siempre.

Lo que no puede faltar

La entrada Dicen que la primera impresión es la que cuenta. Por eso, las quinceañeras ponen especial hincapié en su entrada. Los organizadores recuerdan eventos en los que la homenajeada ingresó en una limusina o en los que se proyectó la imagen de la cumpleañera en una pantalla y después ella apareció cruzando esa pantalla. Las alfombras, la música especialmente elegida e inclusive tocada en vivo y los fuegos artificiales fríos (que salen de picos colocados en el piso) son algunos de los detalles más usados.

El look
Siguiendo las tendencias, las quinceañeras lucen dos vestidos durante su noche de cumpleaños. Normalmente entran a la fiesta con un vestido de fiesta y zapatos altos. Pero, antes del baile, se ponen un diseño más cómodo, normalmente corto, con calzado sin taco. La mayoría prefiere vestidos hechos a medida y según su gusto. Algunas chicas eligen diseñadores sanjuaninos, otras salen de la provincia y buscan especialistas de la talla de Benito Fernández. Este vestuario puede costar entre 5.000 y 8.000 pesos.

El menú
en sillones Si bien en los cumpleaños sigue habiendo mesas, sillas y menúes clásicos para los adultos, los jóvenes son ubicados en livings. Así, los chicos se sienten cómodos y pueden ir cambiando de lugar para compartir con distintos amigos. El menú más común para ellos contiene hamburguesas, lomitos y bandejas de pizzas. Si se busca algo más elaborado, se puede ofrecer cazuelas de pastas con rellenos simples, como ravioles de jamón y queso. El costo de este tipo de menú oscila los 170 pesos, por comensal.

Los tragos
Normalmente hay dos barras con tragos en una sola fiesta, además del carro con jugo natural de naranja. Por un lado, está la barra para los adultos, en la que se sirve bebidas con alcohol. Por otro, la barra para los jóvenes. La idea, en este caso, es que los chicos tengan opciones variadas. Para ellos se prepara tragos tropicales sin alcohol o licuados de diversas frutas con salsas de chocolate. El precio aproximado para los tragos es de 26 pesos por persona cuando el servicio se ofrece desde la recepción de los invitados.

Diseño a puro color
Los colores brillantes y fuertes pueden más que cualquier imagen. Más allá de la temática que tenga la fiesta, las chicas eligen su tono favorito para que esté presente en cada detalle del cumpleaños. Normalmente se usa colores llamativos, como el fucsia, el verde manzana y el violeta. El tono elegido se aplica a las tarjetas, los menúes, los centros de mesa, espacios que se destinan como fondos de las fotografías y hasta para la iluminación, un nuevo elemento utilizado para la decoración que puede costar unos 3.000 pesos.

Los videos
Las filmaciones que tienen como protagonista a la quinceañera y normalmente se proyectan después de la cena, se transformaron en un detalle infaltable desde hace años. Pero en los últimos meses se implementó una nueva modalidad: las filmaciones en 3D. Para eso, antes de la proyección se entrega lentes especiales a todos los presentes. En la mayoría de los casos, las chicas comparten cámara con sus amigas con las que filman réplicas de videos de música, de publicidades o una situación determinada.

El cotillón
Lo más común es comprarlo en Buenos Aires o Córdoba. Sin embargo, hay quienes han ido a buscar el cotillón a Las Vegas. Ahora se le da especial importancia a este detalle. Los antifaces y sombreros se reparten a las personas mayores. Para los amigos de la cumpleañera el abanico se abre: anteojos de colores, pelucas y hasta remeras con luces que cambian al ritmo de la música, son algunos de los más llamativos. Las opciones son tantas, que los organizadores no pueden precisar cuánto se gasta en el cotillón.

Los extras Todas las actividades valen a la hora de buscar que los chicos no se aburran ni un segundo. Entre las opciones más utilizadas se cuenta el maquillaje artístico, los artistas que realizan caricaturas, las máquinas de karaoke, un show de fuegos artificiales o un espectáculo brindado por la cumpleañera, que realiza coreografías frente a sus invitados. Y una de las opciones más populares actualmente: la fotobox, una caja a la que todos pueden entrar para tomarse fotografías y llevárselas de recuerdo.