El sonido de una frenada y el estruendo provocado por el choque entre botellas de vidrio hizo que los vecinos salieran de sus casas. Un camión repartidor de bebidas se encontró de repente con un obstáculo en plena calle que no vio y que lo obligó a frenar intempestivamente. Se trata de uno de los reductores de velocidad que construyó el municipio de Rawson en una zona muy transitada de Villa Krause para evitar siniestros viales, pero que no están señalizados ni pintados por completo, lo que dificulta su visión. Los vecinos de la zona se quejaron de que son "un peligro", sobre todo para las personas que circulan en moto durante la noche.
"Los vecinos de la zona ya sabemos que están estos reductores y tomamos recaudos al transitar, pero la gente que pasa por acá por primera vez no, y es la que corre más riesgo porque termina frenando de golpe o pasando rápido por sobre ellos con riesgo a perder la estabilidad si va en moto", dijo Marina Balmaceda, una vecina que vive sobre Boulevard Sarmiento llegando a Pedro Cobos, donde está uno de los nuevos reductores de velocidad que construyó el municipio para mayor seguridad vial, pero que para los vecinos tienen el efecto contrario por falta de una debida señalización que indique su existencia.
Estos nuevos reductores están en la zona comprendida entre calles Progreso y Quiroga, al Este de Avenida Mendoza. Y se trata de tres lomas de burro de cemento, de unos 10 centímetros de ancho, y con unos 30 centímetros de separación entre sí. Algunos están sin pintar y otros pintados a medias. A esto se suma que ninguno tiene señalización vertical, con carteles que anuncien su proximidad.
"Hace tres noches un chico que venia en moto casi se cayó porque frenó de golpe cuando se topó con el reductor que está en esta esquina de Pedro Cobos y Quiroga. Era un delivery que por la frenada perdió la conservadora que llevaba con el pedido", sostuvo Ricardo López, otro vecino.
Por su parte Marcelo Gómez dijo que el problema se potencia durante la noche por la falta de iluminación y la mayor dificultad para detectar a tiempo estos reductores. "Está bien que pongan lomos de burro para que los automovilistas bajen la velocidad, pero tienen que estar bien señalizados, si no pueden causar accidentes. Espero que el municipio los señalice rápido", sostuvo.
Frente a este reclamo, DIARIO DE CUYO intentó comunicarse con los funcionarios municipales correspondientes, pero no contestaron los llamados.