Pese a la devoción por el santo, muchos fieles no lo acompañaron en la procesión. Se quedaron para poder ocupar alguna de las miles de sillas que se colocaron en la calle y parte de la plaza. Es que este año las fiestas patronales en honor a San Antonio de Padua contaron con la participación de más gente que en la edición anterior. Según datos de la Policía, ayer unas 9.000 personas concurrieron a esta procesión en Media Agua, 2.000 más que en el 2010.
La procesión avanzó más lento de lo pensado. Es que, por primera, vez participaron de la misma los niños que concurren a las academias de danzas folclóricas y árabes, y de la escuela de artes marciales de la villa cabecera del departamento Sarmiento.
Algunas personas hicieron la caminata por la vereda para avanzar más rápido y poder ocupar alguna silla. Pero no tuvieron suerte. Todas estaban ocupadas. Y hasta la calle donde se ubicó el escenario con el altar para la misa estaba colmada por completo. Esto obstaculizó el paso de la camioneta que trasladaba la imagen del santo. Los conductores de la fiesta tuvieron que insistir varias veces para que la gente se apretujara y dejara espacio suficiente para que pudiera pasar San Antonio. Finalmente pudo ocupar su lugar al costado derecho del escenario, luego de ser recibido con bombas de estruendo y miles de papelitos plateados que fueron arrojados al aire.
Finalmente llegó la celebración de la Santa Misa, a cargo de Monseñor Alfonso Delgado. Y muchos de los presentes la siguieron desde lejos, sentados hasta en los canteros de la plaza.

