El ultraderechista Anders Behring Breivik reconoció ayer ser el autor del doble atentado de Noruega, cuya cifra de fallecidos ha rebajado la Policía de 93 a 76, y tildó los ataques de ‘castigo a la socialdemocracia‘ por traicionar al país ‘importando‘ musulmanes.

En su primera comparecencia ante el juez instructor Kim Heger, Breivik, de 32 años, asumió la autoría pero se declaró ‘no culpable‘ y además aseguró que trabajó en cooperación con ‘dos células‘.

‘El detenido aseguró que necesitaba perpetrar estos atentados para salvar Noruega y Europa occidental de los musulmanes y del marxismo cultural‘, relató posteriormente Heger ante la prensa.