Ayer, desde dos entidades, salieron a advertir que su sector continúa siendo el eslabón más débil en la cadena productiva, porque es el que menos sigue recibiendo en el precio final de sus productos. La Asociación de Viñateros Independientes aconsejó a los viñateros no aceptar las condiciones propuestas en los últimos días por la industria, que redujo el precio pagado por el vino blanco y el mosto. Aseguran que las bodegas ahora quieren pagar $3,20 el litro de vino cuando hasta hace una semana el valor era de $4, y encima estiraron los plazos de pago. ‘’A pesar de la disminución en el consumo, el stock de vino remanente en condiciones de ser comercializado es insuficiente, por lo tanto, los precios del vino en el mercado deberán seguir subiendo ya que seguirá en falta el vino apto para consumo interno y externo’’, explicaron. A su vez, desde la Federación de Viñateros volvieron a insistir a los diputados en que se declare el estado de crisis, para paliar el quebranto que atraviesa hoy el productor, y poder postergar por ejemplo el pago de impuestos o deudas atrasadas. También plantearon el déficit que existe en la cadena de valor, con grandes diferencias entre el precio que se le paga al productor por la materia prima y el precio que paga el consumidor por el producto final en la góndola.