Polonia destronó a Brasil y se consagró campeón mundial de vóleibol por segunda vez en su historia, al ganarle 3-0 la final de la Copa del Mundo 2014, de local en la ciudad de Katowice,
El seleccionado europeo, cuyo título anterior lo consiguió en 1974 y que había pedido la final ante Brasil hace ocho años, revirtió una desventaja inicial de 25-18 en el primer set y se impuso por 25-22, 25-23 y 25-22 en las mangas siguientes.

Mateusz Mika, con 22 tantos, fue el máximo anotador del partido, presenciado por una multitud a favor del conjunto polaco.

En Brasil, que cortó una serie de tres títulos mundiales consecutivos, lideraron el tanteador Wallace de Souza y Ricardo Lucarelli, con 18 goles cada uno.

Desde el primer punto del partido, con un exigido armado a una mano, Bruno empezó a dirigir a Brasil. Fue así que un error del servicio polaco decretó el 25-18 ante la desazón de la hinchada. Polonia retrucó con una estupenda tarea de Mika, que descorchó 10 puntos en el parcial y frenó el ímpetu de Brasil. Sin equivocarse, el local rotó y Mika sentenció el 25-22.

Luego del descanso largo, Antiga mantuvo a Zagumny en cancha y el que fue el mejor armador del torneo en 2006, cuando Polonia fue medalla de plata, le cambió el aire al equipo y el ataque se hizo rendidor. Mika no se asustó para el ataque del 24-23 y un error de Lucarelli puso a Polonia a un paso del sueño, en 25-23. Entonado, Polonia no dejó pasar su chance y Brasil, aunque luchó con las credenciales del tricampeón, no pudo dar vuelta la historia. Un error en ataque, un bloqueo de Wlazly y otro error generaron el match ball y, finalmente, Wlazly escribió la historia con el 25-22.

En tanto, el seleccionado de Alemania se adjudicó la medalla de bronce, tras ganarle a Francia: 25-21, 26-24 y 25-23. La Selección argentina culminó en el puesto 11ra.