A principios del siglo pasado, la gente aprovechaba las aguas medicinales de El Salado, Albardón, y ya allí había una precaria construcción. Tan buena fama tenían esas aguas, indicadas especialmente para la cura de dolencias estomacales, que en algún tiempo hasta la vendían embotellada. Sin embargo, con el tiempo el lugar fue cayendo y desde hace décadas es un páramo abandonado, aunque siempre con sus aguas curativas fluyendo entre las piedras. Por eso la Municipalidad de Albardón dio a conocer el proyecto que busca recuperar el lugar con un complejo tipo spa y al aire libre.
El intendente Juan Carlos Abarca anunció que están buscando el financiamiento provincial o nacional, que supera el millón de pesos; a la vez que reconoció que también tuvo conversaciones con unos empresarios europeos interesados.
Baños El Salado está a unos 25 kilómetros del centro de Albardón y el proyecto contempla la construcción de un atrio con gradas en el pozo donde está el surgente, acompañados a sus costados con seis pozones para que los visitantes se bañen y relajen (ver infografía).
Las palmeras del lugar conformarán un Patio de Palmeras y, a pocos metros, habrá un complejo con sanitarios y un patio de servicios. Además, habrá un sectores con quinchos y parrilleros.
Por su parte, otro aspecto llamativo será la creación del Sendero de las Estatuas, que estará cruzando el arroyo y en los alrededores. El arquitecto Héctor Muñoz Daract apuntó que buscan que el sitio sea epicentro de encuentro culturales y que los artistas vayan construyendo estatuas entre los cerros, aprovechando el travertino del lugar.