El proyecto del concejal oficialista de la Capital, Alfredo Nardi, para poder multar a quienes digan piropos ofensivos despertó dudas en cuanto a definir el término para encuadrarlo en la normativa, a la vez que el juez de Faltas, Horacio Morando, advirtió que si lo consideran una ofensa a la moral, esa figura ya está incluida en el Código de Faltas de la provincia.

Morando señaló que se vio sorprendido por la iniciativa en el Concejo Deliberante de la Capital, ya que hay legislación superior a las normativas municipales que contempla las ofensas. ‘Creo que deberán definir qué es un piropo sancionable, es decir, si se trata de una ofensa o un halago, porque no todos los piropos son malos. Pero si el piropo en cuestión lleva consigo la idea de ofensa, eso ya está contemplado en una ley provincial 7.819’, dijo Morando. Se trata de los artículos 117 y 113 inciso 3 del Código de Faltas de la provincia, que multan con hasta $3.000, trabajos comunitarios y/o arresto a quien en lugar público, abierto o expuesto al público, ejecute actos contrarios a la decencia con ‘palabras torpes’ o también a quien por medio de teléfonos o redes informáticas u otros medios profiera insultos o cause molestias o perturbación.

‘El proyecto no sólo incluye piropos ofensivos sino también otro tipo de agresión verbal y pretende incorporar esa figura al Código de Faltas Municipal, ya que no lo contempla. Un caso de personas constantemente agredidas verbalmente son los empleados del Eco y a nivel municipal no hay una normativa que los proteja’, dijo Nardi.

Sobre la definición de lo que se considera piropo, expresó que ‘se trata de una ofensa a la moral o buenas costumbres que no llega a ser un insulto, porque en ese caso sí está tipificado en el Código de Faltas provincial. Hay piropos exagerados o muy ofensivos que no llegan a ser insultos. A su vez, esto pretende ser una herramienta para poder aplicar sanciones no sólo a la falta de respeto a la mujer, sino a sectores vulnerables en general’.

Por otro lado, la concejal opositora del bloque PRO, María Eugenia Raverta, señaló que la iniciativa será de difícil cumplimiento. Otro concejal opositor, Guido Romero, de Producción y Trabajo, coincidió en que deberán definir lo ofensivo del piropo, aunque a priori dijo que acompañará la iniciativa. En tanto que Gustavo Usín, del opositor Actuar, señaló que la aplicación será lo más dificultoso. En tanto, el presidente del bloque Frente para la Victoria, Esteban Díaz, propuso reemplazar la palabra piropo en el proyecto. ‘Pienso que es una iniciativa positiva siempre y cuando se pueda limitar lo que se considere piropo”, dijo el funcionario, quien agregó que “la dificultad será determinar el grado de violencia verbal. Hablar de piropo puede parecer banal, pero como se trata de un tipo de agresión al género, sugiero que la palabra sea reemplazada por ofensa’.