El juez Leopoldo Rago Gallo y la AFIP tienen puestos los ojos, también, en una amplia lista de empresarios que supuestamente gozaron de las maniobras que ejecutó la asociación ilícita. El organismo está a punto de terminar una investigación interna, para determinar quiénes son los que presuntamente cometieron un delito y si por el monto en juego les cabe o no la ley penal tributaria.
Fuentes judiciales aseguraron que podrían haber más detenidos y apuntaron al sector empresario. Aunque no descartaron que se trate de otros operadores de la red delictiva.
En la causa, indicaron las fuentes, todavía hay un prófugo. Es Germán Alejandro Montivero Belmonte, hijo del gremialista y empleado de la AFIP Manuel Francisco Montivero Miranda. Supuestamente, hacía las veces de contacto con los trabajadores del organismo recaudador.