La cosecha 2014 no será un buen recuerdo para los productores sanjuaninos, afectados primero por fuertes heladas tardías, luego la ola de calor extremo y finalmente, las lluvias torrenciales de febrero que causaron focos de podredumbre, los que afortunadamente se detuvieron por los vientos que corrieron posteriormente. Pero donde los parrales sufrieron el ataque de peronóspora, como en el Este de 25 de Mayo, el hongo hizo caer las hojas antes de tiempo (normalmente se caen en mayo) dejando los racimos al descubierto. Los técnicos aseguran además que un racimo sin hojas perderá peso al llegar a los lagares. ’’Estos racimos los voy a cosechar ahora, pero la planta el año que viene no tendrá reservas y no entregará suficientes racimos, o sea, que ya sé que en el 2015 voy a tener otra merma’’, dijo Gerardo Gimeno, productor dueño de 15 hectáreas de uvas tintas Syrah, Cereza y Pedro Giménez. Gimeno calcula que este año tendrá un 60% de merma al terminar la cosecha, ‘’tuve pérdidas por las heladas, luego por las lluvias, donde se me cayó un parral dos veces por tanta agua, y no me escapé de los ataques de las enfermedades’’, se lamentó.