En 2012, el municipio de Zonda no depositó a tiempo en la Dirección General de Rentas los impuestos que les retiene a los proveedores y eso le significó el pago de intereses y una multa por un total de 6.318 pesos. El Tribunal de Cuentas le levantó un cargo por esta cuestión, pero el intendente aseguró que no corresponde porque le demora estuvo justificada. Dijo que no pudieron cumplir a término, porque en diciembre del año anterior le boicotearon el sistema informático y les llevó varios meses recuperar todos los datos.
El otro cargo responde a vacaciones supuestamente mal liquidadas a una contratada del municipio, por un monto de 1.433. Según Monla, el Tribunal de Cuentas se guió por el régimen provincial y no el municipal, que sí permite que a los empleados temporarios se les paguen vacaciones.
