Miraron la lluvia por la ventana y estuvieron calentitos. Atrás quedó el temor de que se les cayera el techo o el agua provocara un cortocircuito. Para 11 familias que habitan la localidad Cristo Pobre, en el Médano de Oro, Rawson, el temporal de ayer fue diferente. Sin preocupación ni inconvenientes, quienes perdieron todo en febrero pasado y ahora habitan los módulos de emergencia que entregó Desarrollo Humano, pudieron soportar las inclemencias del tiempo con una sonrisa en el rostro. Una situación similar vivieron 349 familias más que también habitan estos módulos en distintos puntos de la provincia.
La lluvia comenzó cerca de las 8,30 de la mañana y afectó a todos los departamentos. Y si bien fue persistente y en algunas zonas hasta nevó, al cierre de esta edición no se registró evacuados (ver aparte).
’Antes teníamos miedo y ahora tenemos estufa para no pasar frío’, dijo Jerónimo (9), que aseguró no extrañar su viejo ranchito de adobe. Al igual que él, casi todos los niños que ahora viven en los módulos que entregó el Gobierno tras el último temporal, dijeron estar felices por la nueva vida. ’Nos pasamos la mañana mirando la lluvia por la ventana’, dijo Ludmila, que tiene 7 años. Mientras, los papás disfrutaron de ver a sus hijos contentos. Así, contaron que quedó atrás la imagen de chicos embarrados hasta la rodilla y que ahora sólo ven las zapatillas que dejan en la entrada de las casas para no ensuciar el piso.
’Antes, los chicos vivían resfriados y las casas tenían feo olor por la humedad de las paredes’, dijo Mónica Munizaga, quien agregó además que en su vieja casa, daba lo mismo estar afuera que adentro porque el agua penetraba por todos lados. “Ahora están abrigados”, agregó la mujer.
Los damnificados que viven en Cristo Pobre fueron los primeros en recibir una solución habitacional luego de las lluvias de hace 3 meses y que dejó un saldo de 7.000 personas evacuadas en toda la provincia. Allí entregaron 11 módulos y queda otra tanda más por habilitar. Desde Desarrollo Humano dijeron que todavía falta por terminar unos 736 módulos en toda la provincia. En 25 de Mayo están concluyendo el complejo más numeroso formado por más de 100 viviendas.
Desde la repartición dijeron que todavía hay módulos que no están habitados porque falta la instalación eléctrica y otros servicios. Pero con la lluvia de ayer tuvieron que trasladar a algunas familias a estos sitios, a pesar de no estar terminados. Dijeron que fue para protegerlos y evitar que sigan en sus precarias viviendas.