El Operativo Mosto 2011 que da un incentivo económico al viñatero para que mejoren el sistema de riego, tuvo en su mayoría un destino común: Reparar los pozos de agua, aspecto clave luego de 2 temporadas hídricas muy malas. Eso sí, primero hicieron la inversión y luego -agosto o septiembre- el gobierno les reembolsará el dinero, unos $17 mil como tope para cada productor. Hay disponibles casi $10 millones. Hasta ahora, los que entraron al operativo son menos que el año pasado: 960 en 2010 -$9,7 millones de inversión- y ahora van alrededor de 650, más otros 150 que ya sacaron turno, dijeron de la Dirección de Asuntos Vitivinícolas que confían en que hoy -último día- llegarán a los 1.000 (ver recuadro). En la última temporada el dinero lo tenían que destinar a la compra de agroquímicos, tema que arrastró este año quejas de las entidades viñateras que buscaban que se repita la metodología. La puesta en marcha de los pozos de agua -la mayoría viejos o en desuso- resulta engorroso para la mayoría de los productores, porque para que funcionen y tengan el rendimiento esperado, debe tener en condiciones desde la perforación hasta la conexión eléctrica. Además, la plata puede destinarse a la impermeabilización de acequias, cambiar compuertas internas, hacer puentes e incluso mejorar la nivelación del terreno. Según detallaron, las primeras carpetas presentadas por los viñateros -alrededor de 140 hasta el momento- se trató de arreglos vinculados a la parte eléctrica. Por ejemplo, remplazar viejas bombas de agua que se alimentaban con gasoil por electrobombas o reparar el cablerío. Otros optaron por perforar aún más el pozo y así mejorar el rendimiento, cosa que es habitual en zonas donde las napas bajaron. Los menos, compraron bombas de repuesto para, en caso de rotura en plena temporada de riego intensivo, tener a mano un reemplazo. ‘’Han apuntado a lo que ellos consideran urgente. Porque desde el Estado estamos haciendo lo nuestro en el tema reparación de pozos y que los productores arreglen los suyos es bueno’’, explicó Jorge Escobar, director de Asuntos Vitivinícolas. El funcionario comentó que hay proyectos en donde los viñateros se han unido para hacer una obra que beneficie a varios y que buscan instrumentar la salida legal para que tengan validez los certificados y así con el total del dinero cubrir los gastos. ‘’Varios productores se juntaron para reparar un ramo y ampliarlo y han contratado a una empresa’’, comentó Escobar. Y agregó, ‘’por ejemplo un grupo en Sarmiento va a hacer una batería de pozos para cambiar los motores a explosión por electrobombas. Ahora estamos viendo la logística para que cuando cobren podamos hacer una factura única’’.
