Un pichón de cóndor hembra llegó al Faunístico, derivado por Gendarmería. Tras la atención veterinaria primaria se descubrió que tenía una de las falanges con gangrena seca con pérdida de todos los tejidos blandos, producto de haber caído en una trampa terrestre para zorro.
Los especialistas del lugar le administraron antibióticos para mejorar su estado antes de realizarle una cirugía. La misma se le realizó luego de 10 días de buena evolución en cautiverio. Se amputó la falange mala, se realizó el vendaje correspondiente y se mantuvo con antibióticos.