Domingo Faustino Sarmiento fue una de las personalidades más trascendentes y prolíficas de la historia argentina. Es difícil encasillarlo en una profesión o cargo: fue presidente de la Nación, gobernador de San Juan, ministro del interior, escritor, periodista y militar, pero ningún legado fue tan grande como el que logró como educador, como "el padre del aula". Tan así fue que el día de su muerte, el 11 de septiembre, se celebra el Día del Maestro en Argentina.
En un nuevo aniversario de su nacimiento, el número 208, un repaso por alguna de sus frases más recordadas sobre temas diversos: la educación, el poder, el nepotismo, la moral y la posición de la mujer.
-"Si no existieran dificultades, no habría éxitos".
-"Hombre, pueblo, Nación, Estado, todo: todo está en los humildes bancos de la escuela".
-"Todos los problemas son problemas de educación".
-"Escribo como medio y arma de combate, que combatir es realizar el pensamiento".
-"Los discípulos son la mejor biografía del maestro".
-"Es la educación primaria la que civiliza y desenvuelve la moral de los pueblos. Son las escuelas la base de la civilización".
-"Fui nombrado presidente de la República y no de mis amigos".
-"No está prohibido que un hermano del presidente sea ministro, pero la decencia lo impide".
-"Es la práctica de todos los tiranos apoyarse en un sentimiento natural, pero irreflexivo de los pueblos para dominarlos".
-"Puede juzgarse el grado de civilización de un pueblo por la posición social de la mujer".