Cerca de 1.000 vecinos de Villa Mercedes y La Gran China, al norte de Jáchal, venían arreglándose como podían en los últimos días sin agua potable. La bomba había dejado de funcionar, el pozo que la alimenta se había descalzado por completo y el sistema, que tiene medio siglo de antigüedad y dejaba traslucir una total falta de mantenimiento, no ayudaba para nada. OSSE intervino, colocaron una bomba nueva y luego, por decisión del gobernador Orrego, se construyó un acueducto de 650 metros para otorgar una solución definitiva. Al cierre de esta edición, ajustaban los últimos detalles para que los jachalleros del norte volvieran a tener agua.
En rigor, la obra que realizó OSSE ahora se nutrirá del mismo acuífero de Pampa del Chañar que aprovisiona a todo el departamento. Pero si bien toma agua de ese sistema, no provoca una merma en la cabecera departamental, que tiene una población cercana a los 25.000 habitantes, contra el millar de la zona donde realizaron los trabajos. De hecho, las autoridades de la empresa estatal pusieron en relieve un dato que enciende una alarma: en San José reciben demasiada agua potable, ya que el consumo medio por día por persona es superior a 600 litros, cuando lo recomendable es que no se exceda del rango de 300 a 350 litros. En OSSE consideran fundamental el consumo cuidado, sobre todo en estas épocas de sequía.
"En Jáchal se gasta el doble de agua potable de lo que se debería. Y en el Gran San Juan, hasta el triple", dijo el presidente de OSSE, José Luis Beltrán. Agregó que "esto pasa porque la gente riega hasta las calles con agua potable, muchas veces dejan la manguera abierta y se van por mucho tiempo, y eso implica muchísimo derroche". Para el funcionario, "Jáchal debería hacer un control para no derrochar, el municipio tendría que ver la manera de que se administre un uso cuidado del agua".
Precisamente el caudal que llega desde el acuífero es clave, ya que sus 600 m3/h deberían rendir más con un uso más consciente. De ese caudal, 120 m3/h se derivan a la zona norteña y los otros 480 van a la ciudad jachallera. La obra que acaba de concluir OSSE toma del ramal principal y conduce el agua por cañerías de 75 mm que, en este caso, aportó la unión vecinal de Villa Mercedes, que administra el agua potable en la zona.
Beltrán adelantó que OSSE encargará además un estudio al INA para iniciar una perforación en el norte jachallero. Se hará con recursos estatales, dado que la vecinal no podría costear semejante obra.
En paralelo, el presidente de la empresa insistió en la necesidad de bajar el consumo de agua potable ("que es la más cara", añadió) aplicando un uso racional en una provincia por naturaleza desértica. Dijo que está previsto retomar la colocación de medidores domiciliarios en toda la provincia, para cobrar exactamente por el agua potable que se use y no una tarifa plana. "Ya hay 3.000 medidores colocados", contó el funcionario, y dijo que analizarán cómo continuar, en base a una evaluación de costos de los aparatos y a una planificación integral, que incluye además seguir con las campañas educativas de cómo lograr un consumo más eficiente.