Otro chasco más y van… Parece mentira pero ya es un clásico que cada velada pugilística sanjuanina se cometan errores groseros de parte de las autoridades encargadas de fiscalizar los combates profesionales. Lo realmente triste es que en todos los casos, con sus decisiones, se agravia al reglamento de la Federación Argentina de Box. Antenoche en el Estadio, dos jurados (Preziosa y Peña, ya citados en la crónica) y el fiscal de ring, Apolinario Soto, consumaron en su ignorancia un atropello a la letra escrita perjudicando a un trabajador del ring como es el boxeador cordobés Quiroga. Los jurados no respetaron el artículo 10.22 c: “No podrá existir ningún round con resultado empate (10 x 10), quedando este resultado exclusivamente para el combate de así indicarlo la suma de puntos”. El fiscal no cumplió con la norma 07.03 f: “Controlará las tarjetas…durante el transcurso del combate haciendo rectificar de inmediato todo error que pudiera cometerse…” ¡Más claro…! Nadie puede dudar de la honestidad de las personas designadas, pero sería bueno que de vez en cuando dedicaran algunos minutos a leer el reglamento. Se acabó el tiempo del voluntarismo. Hace falta eficiencia en la acción porque si la cabeza anda mal por la Federación, no puede esperarse que el cuerpo, el boxeo en general, se mejore.
