La noche estaba fresca, por lo que las camperas y buzos se transformaron en los mejores aliados. No para soportar el frío, sino para camuflar las botellas de fernet y las cajas de vino. Los más precavidos fueron al Dique de Ullum el viernes pasado y enterraron las bebidas. Es por eso que aunque este año triplicaron los controles policiales, los jóvenes se las ingeniaron para que el alcohol (cuyo consumo en estos lugares está prohibido por la Ley Seca) fuera la gran compañía de la noche, mientras hacían la previa del Día de la Primavera. Heridos, detenidos y robos fue el resultado de una movida nocturna, hasta la madrugada de ayer, que cada año es más salvaje.
El único lugar que habilitaron para pasar la noche en el Dique de Ullum fue el Palmar del Lago. Es por eso que a la 1:30 de ayer ya no cabía un alfiler. Tuvieron que cerrar las puertas y se quedaron afuera más de doscientos vehículos. Aunque el tráfico se vio durante todo el domingo, la gran afluencia de gente empezó a notarse pasadas las 21. Según la Policía, fue el doble de gente a acampar al dique con respecto al año pasado. Hubo más de 25.000 personas.
Las calles internas del camping estaban plagadas de chicos. No cabía una carpa más y los grupos deambulaban bailando y cantando. Botellas plásticas cortadas por la mitad, jarros térmicos. Todo recipiente fue bueno para compartir cualquier clase de bebida alcohólica. Aunque las preferidas fueron el vino y el fernet. Esto, a pesar de que durante toda la noche la Policía fue carpa por carpa controlando que no tuvieran bebidas alcohólicas.
Asados, sánguches, choripanes, cumbia y música electrónica. En la previa del Día de la Primavera hubo de todo y para todos los gustos. Chicas de jeans ajustados, de shorts y hasta de vestido. Lentes flogger, camperas doradas, pañuelos onda hippie en el pelo y mucha diversión. Aunque la verdadera fiesta estuvo al costado del lago. Allí, los chicos bailaron hasta el amanecer.
Pero la diversión se vio opacada en varias oportunidades. Por una pelea, un chico terminó herido y fue trasladado al hospital Rawson. Los agresores fueron detenidos. Todos, menores de edad y aparentemente alcoholizados. Los robos también fueron moneda corriente. Carpas, conservadoras y principalmente la bebida fue lo que se robaron durante la noche, según informó la Policía.
No fue fácil ingresar al camping. Hubo que pasar tres filtros policiales. Es por eso que tardaron al menos una hora y media desde el badén que está en El Pinar hasta el Palmar del Lago. El primer control policial estuvo en El Pinar; el segundo, cerca de de la entrada al embarcadero; y el tercero, en la puerta del club. En todos, pararon los vehículos para controlar que no llevaran bebidas alcohólicas. Los policías revisaron desde el motor, los guardabarros, los baúles y hasta las mochilas de los jóvenes. Aún así, se las ingeniaron para pasar bebidas. Según la Policía, incautaron unas 1.000 botellas de fernet y otras 1.000 cajas y botellas de vino. Esta mercancía está en la Comisaría 15ta, de Ullum.
Al menos 10 minutos por vehículo tardaron los policías en hacer los controles. No sólo hicieron que los ocupantes descendieran, sino que además revisaron las mochilas, los bolsos y las conservadoras. Hubo mucho enojo y caras largas por parte de los adolescentes que se quedaron sin el arsenal de bebidas antes de entrar al predio. Los chicos que estuvieron en este sitio tenían entre 12 y 18 años.

