María Amalia Lacroze de los Reyes Oribe viuda de Fortabat Pourtale fue nieta del empresario del transporte Federico Lacroze, quien estableció la primera línea de tranvías en Buenos Aires y del político uruguayo Manuel Oribe. A raíz del fallecimiento de su segundo esposo, Amalia Fortabat asumió a los 54 años la dirección de Loma Negra y heredó una fortuna que, además abarcaba compañías, estancias, ganado, aviones, obras de arte y una planta de inseminación.

El 23 de octubre de 1976, puso en marcha la Fundación Alfredo Fortabat y Amalia Lacroze de Fortabat (luego renombrada a Fundación Amalia Lacroze de Fortabat), que tiene como objetivo promover iniciativas u obras de carácter educacional, cultural, artístico, benéfico, social, deportivo y filantrópico.

En 1977, decidió construir una empresa en Catamarca y a partir de entonces las ganancias de la compañía se incrementaron a partir de la realización de diferentes obras públicas, tanto durante la dictadura militar cuanto en gobiernos democráticos, ya que fue proveedora exclusiva de los proyectos de El Chocón, Yacyretá, Salto Grande, Dique Arroyito y Casa de Piedra.

En 1993 adquirió el paquete mayoritario del diario La Prensa, que presidió hasta 1995. Su vuelco a los medios de comunicación se completó con participaciones en las radios El Mundo y Horizonte. Durante 1999 se fracturó una cadera por una caída y tuvo otras complicaciones de salud. En 2008 fue internada en el sanatorio FLENI debido a una descompensación cardíaca.

Amalita era habitué de los festejos que los sucesivos embajadores de los Estados Unidos realizan en la residencia diplomática cada 4 de julio. Al momento de su fallecimiento, era propietaria de Ecocemento, Lomax, Recycomb, el tren de carga Ferrosur Roca, de Estancias Unidas del Sur y de su Fundación, que mantiene con donaciones instituciones sociales y ONGs. En 2005, tras la venta de Loma Negra, enfocó su actividad empresaria hacia los negocios agropecuarios.

Fuente: DyN