Al menos 124 personas han muerto en los últimos nueve días en Misrata, a unos 200 kilómetros al Este de Trípoli, informó ayer el portavoz de los rebeldes libios Ahmad Jalifa, en una conferencia de prensa en Bengasi. “Hay una gran crisis en Misrata”, dijo Jalifa, al subrayar que entre los heridos hay cincuenta casos graves que necesitan ser operados urgentemente. El representante de los revolucionarios explicó que allegó al puerto de Misrata un barco con ayuda humanitaria procedente de Italia.
