Tras la nota que publicó ayer DIARIO DE CUYO sobre las motos particulares de los efectivos policiales que estacionan ilegalmente sobre una de las veredas de la Central de Policía, el Gobierno opinó sobre el tema y reconoció la violación de las normas de tránsito, aunque la justificó. El secretario de Seguridad Gustavo Fariña dijo que esta “irregularidad existe”, pero que se debe a la “operatividad” de esta dependencia policial que quedó inmersa en un sector donde el tránsito vehicular creció considerablemente. Ayer hubo más de 50 motocicletas estacionadas sobre la vereda Norte de este edificio, pese a que hay una ordenanza que lo prohibe. No hubo multas.
En principio, Fariña no quiso opinar sobre este tema porque dijo que no formaba parte de su agenda. Pero luego admitió que las motos son estacionadas ilegalmente. Agregó que esta es una situación “muy irregular que existe”, pero que en gran parte tiene que ver con la ubicación de la Central de Policía. “El edificio quedó en un radio de microcentro donde el tránsito vehicular creció notablemente. Y a él llegan los patrulleros que traen los detenidos a los médicos legistas y que se tienen que estacionar frente a la Central. Se está violando el reglamento, pero no se puede caminar durante tres cuadras llevando al detenido. Esto provoca que en algunos momentos haya cuatro o cinco vehículos policiales estacionados en doble fila o en ochavas. Somos conscientes de los trastornos que esta operatividad provocó y estamos analizando cómo solucionar el tema”, dijo Fariña.
El funcionario agregó que una solución sería contar, cerca de la Central, con una dársena para estacionar los vehículos policiales, aunque es una medida que no se puede concretar. El fundamento: es ilegal construir dársenas de uso exclusivo para una entidad. Sostuvo que la alternativa más efectiva será trasladar este edificio a la periferia, medida que ya está programada.
Nueva sede
El Gobierno tiene planificado trasladar el edificio de la Central de Policía a un terreno ubicado en Avenida de Circunvalación y España, junto al Centro Integral de Seguridad y Emergencias 911 (Cisem 911). Por ahora se está trabajando en su expropiación.