Atrás quedaron diez títulos con diferentes clubes donde jugó y los siete años defendiendo la camiseta de la selección Argentina de vóleibol, con la cual llegó a disputar dos juegos olímpicos y un par de mundiales. Pero ahora Pablo Meana tendrá una nueva función, ya fuera del rectángulo de juego. Aprovechando sus conocimientos sobre la posición que también ejerció, la de líbero, tendrá el rol de entrenador de líberos en uno de los animadores las últimas temporadas de la Liga Buenos Aires Unidos. “Yo siempre expresé la idea de poder cumplir esta función, y voy a ser el primero, porque no hay en el mundo. Waldo (Kantor, el técnico) se enteró, me llamó y coordinamos para empezar a trabajar”, explicó el gringo y agregó “ya cuando estaba en Rusia jugando enseñé algo a un par de juveniles, pero ahora es todo más serio”.
